Discourso objetando a los nuevos museos Smithsonian
December 14, 2020
Reservando el derecho de objetar…
Quiero agradecer el caballero de New Jersey por traer este tema al Senado hoy. Los programas culturales pueden representar una fracción pequeñísima de los gastos federales, pero son magnificados muchas veces por su impacto substantivo y simbólico.
La cultura está rio arriba de la política. Es más importante, y más merece más de nuestra atención.
Por esa razón, la Institución Smithsonian es mas que cualquier otro renglón presupuestario en el presupuesto federal. Es un0 de los grandes triunfes culturales de nuestra republica.
Desde el momento de nuestra fundación, los Estados Unidos ha enfrentado un problema en la historia.
¿Cómo cambiamos las diferencias culturales, religiosas, étnicas, y regionales de nuestro pías vasto de una debilidad potencial a una fortaleza real?
La manera en la cual nuestra nación lo siempre ha logrado es por crear instituciones que unen los Americanos alrededor nuestras intereses compartidos y los acordes místicos de la memoria colectiva.
La Constitución. El mismo Senado. Nuestra economía de empresa libre. Nuestras fuerzas armadas y escuelas publicas. El federalismo. La Primera Enmienda. Y aún March Madness cumple esta descripción. Todos ellos tienen el poder de aprovechar nuestras diferencias individuas y de comunidades para el bien común de la nación entera.
La Institución Smithsonian hace la misma cosa. Teje la miríada hebras de la historia triunfante de América en una historia no perfecta pero heroica.
Americanos de cada edad, raza, credo, y antecedente vienen a Washington de todo el pías para visitar a los museos de la Smithsonian. La historia natural. Historia Americana. Aire y Espacio, Arte Americano. El Zoológico Nacional.
Entre las paredes de un museo de la Smithsonian, como en la Galería Nacional de Arte o los grandes monumentos dispersados en esta ciudad, no hay un nosotros y un ellos… solo hay nosotros.
Entonces mi objeción a la creación de un nuevo museo de la Smithsonian basado en una identidad de grupo—lo que Theodore Roosevelt llamó “Americanismo con guión—no es un asunto presupuestario o de tecnicismos legislativos. Es un asunto de la unidad nacional y la inclusión cultural.
Hemos visto en años recientes lo que pasa cuando complacemos la balcanización cultural y de identidad de nuestra comunidad nacional. La así llamado “teoría critica” apuntalando este movimiento no celebra la diversidad; la convierte en un arma.
Afila todos esos guiones en cuchillos y dagas. Ha cambiado nuestros campuses universitarios en espectáculos de queja, y ha suelto populachos orwellianos para cancelar cualquier que se atreve a expresar un pensamiento original.
Especialmente al final de un año tan deshilachador y fracturador, el Congreso no debe astillar una de las piedras principales culturales de nuestra solidaridad nacional.
La Institución Smithsonian no debe tener un museo exclusivo de la historia Latinoamericana, ni de la historia de la mujer, ni de la historia americana de hombres, ni de la historia Mormona, ni de la historia Asiatico Americano. La historia americana es una historia inclusiva que nos debe unir.
A nosotros.
Señor/Señora Presidente, el caballero esta correcto en decir que la historia de los Latinoamericanos es una parte vital de la historia de América.
También, por supuesto, la es la historia de las mujeres Americanas, que han escrito más que la mitad de la historia Americana desde Plymouth Rock.
Sus historias son nuestras historias. Y son historias que enfáticamente deben ser compartidas por la Institución Smithsonian en el Museo de la Historia Americana. Punto.
No guión.
Ahora, el caballero de New Jersey conoce bien mis puntos de vista tacaños de los gastos federales.
Pero si la historia Latinoamericana o la historia de las mujeres Americanas están subrepresentadas en el Museo de la Historia Americana, es un problema.
Y yo trabajaré con él felizmente para corregirla, aún si significa más dinero, más exhibiciones, nuevos pisos o alas. Entiendo lo que mis colegas quieren hacer y por que. Y comparto su interés en asegurar que estas historias sean compartidas.
Pero la ultima cosa que necesitamos es dividir más a nuestro pías dividido con un conjunto de museos segregados y “separados pero iguales” para grupos de identidad con guión.
En este momento de la historia de nuestra nación diversa, necesitamos nuestro gobierno federal y la Institución Smithsonian a unirnos mas cerca, no separarnos aún mas lejos.
Entonces, Señor/Señora Presidente, yo objeto.